Cosas que aprendes cuándo creces
Hay una niña en el parque y no es capaz de coger impulso en
los columpios; así que cuando alguien la ayuda a elevarse no duda de que lo
hace sin segundas intenciones y ni siquiera cabe la posibilidad de que quiera
hacerle daño.
Esa niña del parque se ha sentado sola en el balancín y
espera a que alguien, que durante una tarde se convertirá en su mejor amigo, se
siente enfrente para darle el equilibrio que precisa. No existe la idea en su
cabeza de que nadie se va a sentar con ella ni de que preferiría que no lo
hicieran para no tener que preguntarse sus motivos.
El reloj marcará su pulso y seguirá su curso y un día esa
niña crecerá; ese día entenderá que nadie la ayudará a elevarse en el columpio
y que el otro lado del balancín seguirá vacío cuándo ella se levante. Le harán
daño, le lastimarán el corazón y poco a poco los rasguños que adornan sus
rodillas se volverán más duros de sanar y aparecerán las cicatrices. Un día las
lágrimas dejarán surcos en sus mejillas y sus ojos verán tanto que morirá la
inocencia infantil.
La niña, que ya no es niña y está un poco más rota, empezará
a desconfiar de las almas puras que se sienten a su lado en el parque, no
volverá a subirse en el balancín para hacer mejores amigos por un día porque
para ella ahora solo tiene valor lo perenne permanente y la espontaneidad del
momento dejará de ser prioridad.
Cuándo la niña crezca, conozca con nombre y apellidos a
todos los villanos de sus cuentos y aprenda todas las cosas que nunca nadie
debería aprender solo nos quedará la esperanza de que alguien se siente con
ella en el columpio y le devuelva el brillo ingenuo, feliz e infantil a su
mirada.
Si algo aprendes cuándo creces es que a veces se es
más feliz en la ignorancia de una niña llena de preguntas.
Escribes moi ben, pero ainda eres una nena que é moi feliz e non che hai razón ningunha para que non sigas sendo feliz cando che saian arrugas e canas. Digocho eu, que teño de todo, e como di Mª Victoria Moreno "que bonito é vivir". Ala!, vai estudar que a ignorancia so fai feliz aos memos e ás memas.
ResponderEliminarA clave é que nunca vou a deixar de ser unha nena e canas xa teño
EliminarMalia todo, que bonito é vivir e que fácil ser feliz. A ignorancia é a felicidade dos que non aspiran a máis e faju di que somos filósofas porque amamos saber, non te preocupes por mín que a nena do conto non vai deixar nunca de ser feliz. ❤️